Ayer tuve una pequeña barbacoa con un cliente, y resulta que empezé a hablar con uno de sus empleados, salió el tema moto, y resulta que tenía una KTM Superduke 990, algo como esto:

Total, que hablando hablando me dice "anda, date una vuelta". Como podréis adivinar no se lo negué, y me di una vueltecita por la Gran Vía madrileña a las 11 de la noche.... Buff, menudo sonido, menuda maniobrabilidad, menudo todo señores... Es un juguete, un capricho... emocionao me quedé. Luego cogió la mía y me comentó que era muy cómoda, que andaba mucho y claro, que era muuu chula jeje...
A todo esto, cuando vuelvo a dejar la moto aparece un compañero mío de curro, que siempre viene en una Vespa 75 Primavera del año de la tana, con una Speed Triple como esta:

Total, que nos ponemos a hablar los tres, y porque tenía prisa, que si no también le pillo la Triumph

Moraleja: bajo ningún concepto cojáis una moto de este estilo, no os hará dormir. Como mucho mirar, pero no fijarse mucho

