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CONSECUENCIAS.: Mi orgullo herido, la cara de jilipollas oculta (menos mal) por el casco, y una mala hostia del 15.
CONCLUSIONES: los tacos anticaída la mejor inversión que he hecho en mi niña,.protegen perfectamente y, ni intermitencias ni carenado han sufrido golpe alguno.
No es la primera vez que me pasa. Con mi anterior montura me sucedió en tres ocasiones, lo que demuestra que la mala cabeza y aquello de que el hombre es el único animal que no quita la pinza y se cae tres veces.... unido a que vamos haciéndonos mayores.....se confirma plenamente.
Ojito que le pasa a cualquiera.
Ráfagassss


